En clase de Referentes Clásicos, una hora a la semana, cada uno de los alumnos nos leíamos un libro relacionado con Grecia o Roma, y a mí me tocó éste, El Hostal de Los Dioses Amables.
El Hostal de los Dioses Amables es un libro escrito en 1997 por Gonzalo Torrente Ballester, un autor con una faceta que le caracteriza fácilmente, la ironía.
Gonzalo Torrente Ballester nació en Ferrol, La Coruña, en el año 1910. Fue profesor, crítico, autor dramático, periodista español y novelista. Con este último oficio fue con el que obtuvo ese gran prestigio, que aún mantiene. Como narrador, Torrente sobresale por la ironía de sus narraciones. Esta ironía se basa en la percepción de lo real en lo maravilloso y de lo maravilloso en lo real. Además, Torrente utiliza la mitologia clásica representada por los dioses del Olimpo y a través de ellos de ellos relaciona los mitos con la religion y las creencias o, mejor dicho, con la pérdida de creencias en los dioses y en lo que ello acarrea.
Y la novela "El Hostal de los Dioses Amables" no va a ser menos y, cómo no, está llena de expresiones irónicas, y, como es típico en las novelas de Torrente y como hemos dicho antes, trata sobre la pérdida de creencia en los dioses griegos.
Esta novela se plantea la hipotética preocupación de los dioses griegos por la poca creencia que tienen los humanos, mortales, en ellos, y que poco a poco va disminuyendo. Así, los dioses griegos buscan soluciones, y una de ellas es introducirse tímidamente en el mundo de éstos y así hacerles ver que existen verdaderamente.
Pero esta obra, aunque sea una novela fictícia, ya que obviamente no existieron los dioses griegos, está basada en un hecho que sucedió realmente y que se le llama en la ciencia empírica, filosofía, el paso del mito al logos. Pero, ¿en qué radicaba este paso?.
Los griegos antes del siglo V, creían en mundo de los mitos, donde las fuerzas naturales son personificadas y divinizadas, donde los dioses son los que influyen en el curso de los acontecimientos, o sea, los fenómenos y sucesos del universo se les hacen depender de la voluntad arbitraria de los dioses.
Pero en el siglo V a.C., por varias causas, una de ellas: el hecho de que los griegos vieron que en otras culturas habían otros dioses diferentes a los suyos y con otras características, los griegos suplantaron la idea de arbitrariedad de los dioses por la idea de necesidad, es decir, por una nueva actitud intelectual que les dice que la naturaleza se rige por sus propias leyes. Así pues, poco a poco, este pensamiento fue evolucionando y los griegos dejaron de creer en los dioses inmortales griegos de los que todo dependía.
Pues bien, esta nueva forma de racionalidad suele describirse como el paso del mito al logos.
El Hostal de los Dioses Amables es un libro escrito en 1997 por Gonzalo Torrente Ballester, un autor con una faceta que le caracteriza fácilmente, la ironía.
Gonzalo Torrente Ballester nació en Ferrol, La Coruña, en el año 1910. Fue profesor, crítico, autor dramático, periodista español y novelista. Con este último oficio fue con el que obtuvo ese gran prestigio, que aún mantiene. Como narrador, Torrente sobresale por la ironía de sus narraciones. Esta ironía se basa en la percepción de lo real en lo maravilloso y de lo maravilloso en lo real. Además, Torrente utiliza la mitologia clásica representada por los dioses del Olimpo y a través de ellos de ellos relaciona los mitos con la religion y las creencias o, mejor dicho, con la pérdida de creencias en los dioses y en lo que ello acarrea.
Y la novela "El Hostal de los Dioses Amables" no va a ser menos y, cómo no, está llena de expresiones irónicas, y, como es típico en las novelas de Torrente y como hemos dicho antes, trata sobre la pérdida de creencia en los dioses griegos.
Esta novela se plantea la hipotética preocupación de los dioses griegos por la poca creencia que tienen los humanos, mortales, en ellos, y que poco a poco va disminuyendo. Así, los dioses griegos buscan soluciones, y una de ellas es introducirse tímidamente en el mundo de éstos y así hacerles ver que existen verdaderamente.
Pero esta obra, aunque sea una novela fictícia, ya que obviamente no existieron los dioses griegos, está basada en un hecho que sucedió realmente y que se le llama en la ciencia empírica, filosofía, el paso del mito al logos. Pero, ¿en qué radicaba este paso?.
Los griegos antes del siglo V, creían en mundo de los mitos, donde las fuerzas naturales son personificadas y divinizadas, donde los dioses son los que influyen en el curso de los acontecimientos, o sea, los fenómenos y sucesos del universo se les hacen depender de la voluntad arbitraria de los dioses.
Pero en el siglo V a.C., por varias causas, una de ellas: el hecho de que los griegos vieron que en otras culturas habían otros dioses diferentes a los suyos y con otras características, los griegos suplantaron la idea de arbitrariedad de los dioses por la idea de necesidad, es decir, por una nueva actitud intelectual que les dice que la naturaleza se rige por sus propias leyes. Así pues, poco a poco, este pensamiento fue evolucionando y los griegos dejaron de creer en los dioses inmortales griegos de los que todo dependía.
Pues bien, esta nueva forma de racionalidad suele describirse como el paso del mito al logos.
Habrá que leer este libro tan interesante. Muy buen post sigue así!
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